Ahora resulta que las bolsas de plástico son ‘caca’ porque contaminan mucho. En paralelo a esta campaña de publicidad, aparece una campaña contra las prostitutas. Bolsa caca. Puta caca. Porque lo dice una empresa, porque lo dice una moda, algo, de pronto, está mal y hay que perseguirlo. La prostitución es un negocio triste y sórdido. Un negocio que existe en el mundo por muchas y complicadas razones. Hay quienes piden que se regule y otros, los más, que se lo quiten de su calle. Hay algunos que hablan mucho y no se dan cuenta de que tienen un pequeño prostíbulo en su casa, en las horas de madrugada de su canal de televisión o en las últimas páginas de su periódico. Todos tenemos dentro una pequeña prostituta y aún así, parece que nos escandalizamos cuando nos interesa para acabar con algún problema. Como siempre, manda la ley de la oferta y la demanda. Si no hay demanda, no hay oferta. Eso deberíamos tenerlo bien claro en estos tiempos de crisis económica.
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Hombre maquinista es en parte cierto lo que dices, pero todo con un orden, lo que hay por Escosura,k avila y adyacentes es un autentico escandalo, que hagan su trabajo, pero sin altercados y lo dicho para ahí sirve para Miguel de Ara, la calle del caballo y demás