Hoy es el cumpleaños de Ainkaren, la casa cuna. Lleva 10 años ayudando a las mujeres que se quedan embarazadas y quieren seguir con el embarazo. Trescientos cincuenta bebés que podían haber no nacido están en el mundo gracias a esta asociación que lucha diariamente por ayudar a las mujeres que se les acercan antes, durante y después del embarazo. Ainkaren se dedica a escuchar a las mujeres embarazadas y a echarles una mano. No las deja solas ante un problema que van a arrastrar el resto de sus vidas. El dinero público se va a otros fines por el mismo embudo de siempre. Se paga una casa de la mujer que promueve actividades de mujeres: cine, relatos, literatura… No está mal. Sin embargo, la mujer es más que eso. Es un ser humano lleno de dignidad. Es, incluso, algo sagrado. Por eso, para mí, Ainkaren es, con mayúsculas, la Casa de la Mujer.
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Te felicito padrino por haber sacado a la palestra la casa de la mujer, otra asociación subvencionada que solo sirve para hacer política. mucha charla, muchas actividades como muy bien dices, y poca efectividad, debiera llamarse la casa de las feministas, porque eso es lo que es realmente.
Yo estoy de acuerdo con Javier Aunque apluado que esos 350 niños hayan venido al mundo y no se hayan ido en trocitos por los aspiradores
Creo que hace falta un apolitica que revise las clinicas abortivas que hoy por hoy es un asqueroso negocio MUY LUCRATIVO y a la larga quein sale perdiendo es la madre que por no haber una reflexion madura despues tiene problemas muy gordos, esos no se dice Como tampoco los muy canallas explican como van a matar al hijo que ya llevan en sus entrañas De una forma tan inhumana que yo solo les deseo que prueben ellos un poco