Necesitamos el coche para comprar el pan, para ir a la farmacia y para ir al supermercado. En los nuevos barrios que nos están construyendo las distancias son enormes. Sin embargo, para movernos por la ciudad, debemos dejar el coche en el garaje, si es que tenemos garaje. Para ir al centro habrá que coger el tranvía y olvidarse del coche que nos sirve ya solo para el pan y las aspirinas. No habrá forma de aparcarlo, ni de circular por algunas calles del centro de la ciudad. Es la vida moderna, la sostenibilidad, el futuro, la conciencia ecológica. Mientras tanto, rezamos para que se sigan fabricando coches sin parar en un pueblo cercano a la ciudad del tranvía y que se sigan vendiendo a muy buen ritmo en los concesionarios para salir de la crisis y que la economía mejore y nos mantenga el empleo a todos. Es el fin del mundo. Sosténgase el que pueda.
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Desgraciadamente el coche lo tengo que coger casi a diario, para hacer la compra en el super, para ir a ver a mi madre, para…
Para el pan no lo necesito, ya que cuelgo mi bolsita en la entrada de mi piso y el panadero me deja las barras que le indico.
Para ir al centro ya utilizo el bus y hablo con la gente, cedo mi asiento a las personas mas mayores que yo…
Saludos