Ayer salió la noticia –o el globo sonda, como ustedes prefieran- de que el Gobierno se plantea una reforma del mercado laboral basada en recortar los días de indemnización por despido con alguna fórmula de pago alternativa, es decir, imponer eso que se llama el modelo austriaco. Haría el mercado más flexible y quizá, generaría más empleo. Bien, hablemos de ello. ¿Con quién? Con nadie. Los representantes de los trabajadores están ocupados hablando de los muertos de la guerra. Eso que tanto les gusta. Pasándose por el arco del triunfo la ley de Amnistía y la Transición, ese proceso del que hablamos con tanto orgullo. Señores representantes de los trabajadores, expliquen que hacen presionando a la justicia por un lado y exigiendo la tutela judicial por otro. Se les ha visto el plumero.
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