Un cuento irlandés:
Había una vez un hombre afiliado a un partido nacionalista – independentista. Un día, después de una manifestación, se dio cuenta de que no estaba satisfecho y decidió buscar la independencia de su ciudad. Sus esfuerzos fueron vanos y, después de reflexionar, empezó con nuevas ilusiones a buscar la independencia de su barrio. No era suficiente. Nada le satisfacía y decidió independizarse junto a su familia. Pero no era feliz en la república independiente de su casa, así que se independizó él solo en su cuarto.
Empezó a pensar y a leer libros. Se dio cuenta de que se estaba bien con uno mismo y, pasados unos días, tuvo la certeza de que había aprendido a estar a solas. Entonces, salió de su cuarto, de su calle, de su barrio y de su país y se sintió parte de un todo.
Al menos, no utilizaba la violencia. ¿No?
Ya lo tengo!!. Es la historia del creador de IKEA!!.