En mi colegio había un momento clave todos los años: el de la revisión médica. Era un momento complejo. Nos iban llamando de dos en dos por riguroso orden de lista. Había dos posibilidades: o te la miran o no te la miran. Los dos primeros de la lista iban como corderos llevados al matadero. Al volver, todos les preguntábamos. ¿La miran o no? En la política y en la economía pasa lo mismo. Solbes decía «este año no nos la miran». Pizarro le decía «que sí, que sí que la miran». Todo el mundo pensó que Solbes tenía razón y que había ganado el debate preelectoral. Hoy, los periódicos dicen que estamos ya al borde de la recesión. Hoy, la economía nacional nos recibe con una bata blanca y un fonendoscopio y nos dice: bájense los pantalones.