Algunos dirigentes políticos de nuestra tierra siguen sin entender que lo que el ciudadano quiere en estos tiempos de crisis es sensibilidad a la hora de transmitir los mensajes sobre el gasto. El ciudadano no tolera que el consejero Larraz llame “pequeños detalles” a 54 millones de euros, por muy “pequeños” que sean desde el punto de vista presupuestario y de inversión global. Tampoco hace gracia que el ayuntamiento de la ciudad se gaste doscientos mil euros en publicitar el Fondo Estatal de Inversión Local. Para eso ya está la preferencia que los políticos tienen en los medios de comunicación. Además, si alguien quiere saber cuánto va a durar la obra que tiene en la puerta de casa, ya se buscará la vida. No necesitamos una campaña de comunicación pagada entre todos para saber cosas que nos dice todos los días la tele, la radio y los periódicos. No hace falta una campaña de comunicación para saber cómo ha quedado el Zaragoza.
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Como lo del logo ese que está por todas partes. ¿no era para promocionarnos fuera?
Derroche absurdo en tiempos de crisis…
unos viviendo en la puta miseria, siendo menos que mileuristas y otros gastándose lo que no es suyo en absurdeces.
De paliza o de horca, aunque suene mal.
¡Qué panda de hijos de puta!